quarta-feira, 23 de abril de 2014

Gabriel García Márquez e Palestina

 Foto: AP
Gabriel García Márquez encontra o líder palestino Yasser Arafat
Gabriel García Márquez encontra o líder palestino Yasser Arafat em Cartagena, na Colômbia (20/10/1995)

O Editor da revista "Estudios Árabes", Saad Chedid, em seu artigo "Gabriel García Márquez y Palestina" para o site Rebelion, publicado em 22/04/2014, resgata o artigo de G. García "Beguin y Sharon, prêmio Nobel de la Muerte" de 03/10/1982.


Chedid declara em seu artigo:


"Entre tantos recuerdos, que se acumulan sobre la muerte de Gabriel García Márquez, quiero rescatar dos artículos periodísticos, que él sólo se animaba a escribir, por su solidaridad con los pueblos víctimas de las potencias imperiales."

(...)

"Al año siguiente, luego de la invasión israelí al Líbano, leí e incorporé a la revista Estudios Árabes, en el número de octubre-diciembre de 1982, su famoso artículo “Begin y Sharon, Premio Nobel de la muerte”, publicado en el diario Expreso de Guayaquil, el 3 de octubre de 1982, y que transcribo a continuación, como un humilde homenaje a la memoria de un hombre íntegro, digno y solidario con las causas justas del mundo.

Porque Gabriel García Márquez, no dejó nunca que la fama y la gloria, bien merecidas, lo obnubilaran frente al poder, al que como señalara Edward W. Said, pocos se animaban a enfrentar diciéndoles la verdad, y cuyo texto me exime de cualquier comentario."

Saad Chedid insere em seu artigo o texto de Gabriel García Márquez: 


Begin y Sharon

Premio Nobel de la muerte

Gabriel García Márquez

Lo más increíble de todo es que Menahem Begin sea Premio Nobel de la Paz. Pero lo es sin remedio aunque ahora cueste trabajo creerlo desde que le fue concedido en 1978, al mismo tiempo que a Anwar Sadat, entonces presidente de Egipto, por haber suscripto un Acuerdo de Paz separado de Camp David. Aquella determinación espectacular le costó a Sadat el repudio inmediato de la comunidad árabe y más tarde le costó la vida. A Begin, en cambio, le ha permitido la ejecución metódica de un proyecto estratégico que aún no ha culminado, pero que hace pocos días propició la masacre bárbara de más de un millar de palestinos refugiados en un campamento de Beirut.

Si existiera Premio Nobel de la Muerte, este año lo tendrían asegurado sin rivales el mismo Menahem Begin, y su asesino profesional, el general Ariel Sharon.

En efecto, vistos ahora, los Acuerdos de Camp David no tendrían para Begin otra finalidad que la de cubrirse las espaldas para exterminar primero a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), y establecer luego nuevos asentamientos israelíes en Samaria y Judea. Para quienes tenemos una edad que nos permite recordar las consignas de los nazis, estos dos propósitos de Begin suscitan reminiscencias espantosas, la teoría del espacio vital con la que Hitler se propuso extender su imperio a medio mundo, y lo que él mismo llamó la solución final del problema judío, que condujo a los campos de exterminio de más de seis millones de seres humanos inocentes.

La ampliación del espacio vital del Estado de Israel y la solución final del problema palestino tal como las concibe hoy el Premio Nobel de la Paz de 1978 se iniciaron en la noche del 5 de junio pasado, con la invasión del Líbano por las fuerzas militares israelíes especializadas en la ciencia de la demolición y el exterminio.

Menahem Begin trató de justificar esta expedición sangrienta con dos argumentos falsos. El primero fue la tentativa de asesinato del embajador de Israel en Londres, Shlomo Argov, a fines de mayo. El segundo fue el supuesto bombardeo de Galilea por la OLP refugiada en el Líbano. Begin acusó del atentado en Londres a la resistencia palestina y amenazó con represalias inmediatas. Pero Scotland Yard reveló más tarde que los verdaderos autores habían sido miembros de la organización disidente de Abu Nidal, que en los meses anteriores había asesinado inclusive a varios dirigentes de la OLP.

En cuanto al segundo argumento, se comprobó muy pronto que los palestinos sólo dispararon dos o tres veces contra Galilea y causaron un muerto. Los disparos fueron hechos como represalia de los bombardeos de Israel contra los campamentos de refugiados palestinos que dieron muerte a varios centenares de civiles.

En realidad la guerra sin corazón desatada por Begin con base en aquellos dos pretextos, no era nada nuevo para los lectores del semanario israelí Haclam Haze, que había anunciado con todos sus pormenores desde setiembre de 1981, es decir, nueve meses antes. Contra el refrán según el cual una guerra avisada no mata a nadie, las tropas israelíes –que se consideran entre las más eficaces y las más armadas del mundo—mataron en las primeas dos semanas a casi 30.000 civiles palestinos y libaneses y convirtieron en escombros a media ciudad. Sus pérdidas en el mismo período, no habían pasado de 300.

Ahora la estrategia de Begin es muy clara. Al destruir a la OLP, ha tratado de eliminar al único interlocutor palestino que parecería capaz de negociar una paz fundada sobre la base de la instalación de un Estado palestino independiente en Cisjordania y Gaza, que el propio Begin ha proclamado como territorios ancestrales del pueblo judío. Ese acuerdo estaba al alcance de la mano desde el 4 de julio pasado, cuando Yasser Arafat, presidente de la OLP, aceptó el principio de un reconocimiento recíproco de los pueblos de Israel y Palestina, en una entrevista publicada por Le Monde, de París, en aquella fecha. Pero Begin ignoró esa declaración, que entorpecía sus proyectos expansionistas ya en pleno desarrollo, y prosiguió con el establecimiento del cinturón de seguridad en torno de Israel. Un cambio de gobierno en Siria podría ser el paso inmediato, con la extensión consiguiente de una guerra desigual y sin cuartel, cuyas consecuencias finales son imprevisibles.

Yo estaba en París en junio pasado, cuando las tropas de Israel invadieron el Líbano. Por casualidad, estaba también el año anterior, cuando el general Jaruzelsky implantó el poder militar en Polonia contra la voluntad evidente de la mayoría del pueblo polaco. Y también por casualidad me encontraba allí, cuando las tropas argentinas desembarcaron en las Islas Malvinas. Las reacciones de los medios de comunicación antes esos tres acontecimientos, como la de los intelectuales y la de la opinión pública en general, fueron para mí una lección inquietante. La crisis de Polonia produjo en Europa una especie de conmoción social. Yo tuve la ocasión de agregar mi firma a la de los muy escogidos y muy notables intelectuales y artistas que suscribieron la invitación para un homenaje al heroísmo del pueblo polaco, que se celebró en el Teatro de la Opera de Paris, patrocinado por el Ministerio de Cultura de Francia. Sin embargo, algunos anticomunistas profesionales me acusaron en público de que mi protesta no fuera tan histórica como la de ellos. En aquel clima pasional, toda actitud que no fuera maniqueísta se consideraba ambigua.

En cambio, cuando las tropas de Israel invadieron y ensangrentaron el Líbano, el silencio fue casi unánime aun entre los más exaltados jeremías de Polonia, a pesar de que ni el número de muertos ni el tamaño de los estragos admitían ninguna posibilidad de comparación entre la tragedia de los dos países. Más aún: por esas mismas fechas los argentinos habían recuperado las Islas Malvinas y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas no esperó 48 horas para ordenar retiro de las tropas, ni la Comunidad Económica Europea lo pensó demasiado para imponer sanciones comerciales a la Argentina, en cambio, ni ese mismo organismo, ni ningún otro de su envergadura, ordenó el retiro de las tropas israelíes del Líbano en aquella ocasión.

El gobierno del presidente Reagan, por supuesto, fue el cómplice más servicial de la pandilla sionista. Por último, la prudencia casi inconcebible de la Unión Soviética y la fragmentación fraternal del Mundo Árabe, acabaron de completar las condiciones propicias para el mesianismo demente de Begin y la barbarie guerrera del general Sharon. Tengo muchos amigos cuyas voces fuertes podrían escucharse en medio mundo, que hubieran querido y sin duda siguen queriendo expresar su indignación por este festival de sangre, pero algunos de ellos confiesan en voz baja que no se atreven por temor de ser señalados como antisemitas. No sé si sean conscientes de que están cediendo –al precio de su alma– ante un chantaje inadmisible.

La verdad es que nadie ha estado tan solo como el pueblo judío y el pueblo palestino en medio de tanto horror. Desde el principio de la invasión al Líbano empezaron en Tel Aviv y otras ciudades las manifestaciones populares de protesta que no han terminado, y que el 4 de julio habían alcanzado una fuerza emocionante. Eran más de 100.000 israelíes solitarios proclamando en las calles que aquella guerra sucia no es la suya porque está muy lejos de ser la de su Dios, que durante tantos y tantos siglos se había complacido con la convivencia de palestinos y judíos bajo el mismo cielo. En un país de 3 millones de habitantes, una manifestación de 100 mil personas equivaldría en términos proporcionales a una de casi 2 millones en París, y 8 millones en Washington.

En con esa protesta interna con la que me siento identificado cada vez que conozco las noticias de las bestialidades de los begines y los sharones en el Líbano, y en cualquier parte del mundo, y a ella quiero sumar mi voz de escritor solitario y por el gran cariño, y la admiración inmensa que siento por el pueblo que no conocí en los periódicos de hoy sino en la lectura asombrada de la Biblia.

No le temo al chantaje del antisemitismo. No le he temido nunca al chantaje del anticomunismo profesional, que andan juntos y a veces sueltos, y siempre haciendo estragos semejantes en este mundo desdichado.


Nota: o texto de García Marquéz também foi publicado no site do El Pais em 29/09/1982.



sábado, 19 de abril de 2014

Dia dos Prisioneiros palestinos marca a luta pela libertação

Nesta quinta-feira (17) se comemora o Dia dos Prisioneiros, questão central na luta dos palestinos pela libertação da ocupação militar israelense. Movimentos populares denunciam não apenas o abuso prático das forças israelenses, mas também o aparato jurídico sobre o qual se sustentam “detenções administrativas” arbitrárias e torturas. No fim das negociações entre Autoridade Palestina e Israel, o tema inclui-se no debate sobre o fracasso da diplomacia.


Por Moara Crivelente, da Redação do Vermelho


    Ma'an
Dia dos Prisioneiros palestinos, 17 de abril
Milhares de palestinos participavam de protestos em toda a Cisjordânia
e Faixa de Gaza para marcar o Dia dos Prisioneiros, nesta quinta-feira (17).
Ao menos 10 palestinos foram presos pelas forças israelenses, nesta quinta, de acordo com a agência palestina de notícias Ma'an, quando milhares participavam de protestos em toda a Cisjordânia e na Faixa de Gaza para marcar o Dia dos Prisioneiros. Grandes manifestações foram relatadas em Hebron, Jenin, Nablus e Rersos de repressão dos soldados israelenses.

O regime militar imposto por Israel à maior parte da Cisjordânia caracteriza-se, também, pelo encarceramento de mais de cinco mil palestinos, em grande parte por motivos declaradamente políticos. Desde 1967, quando a ocupação passou a expandir-se de forma acelerada, a partir da chamada Guerra dos Seis Dias, Israel aprisionou aproximadamente 800 mil palestinos.

Os números são relativamente consensuais, mas fornecidos pela Associação palestina de Apoio aos Prisioneiros e de Direitos Humanos, Addameer (“Consciência”, em árabe), e pela Sociedade Acadêmica Palestina para Estudos de Assuntos Internacionais (Passia), que fazem compilações abrangentes de dados e leis israelenses que servem de suporte às diversas expressões de uma força de ocupação.


Entre os prisioneiros contabilizados por Addameer estavam 210 crianças, 21 mulheres e 11 membros do Conselho Legislativo Palestino, instância legislativa da Organização para a Libertação da Palestina (OLP) – da qual a Autoridade Palestina (AP) é o Executivo. A detenção das crianças e de palestinos é condenada internacionalmente, reconhecida não apenas como violações graves, mas também como uma estratégia de desestabilização social e política.
Prisoneiros palestinos
De acordo com a Addameer, até 1º de março deste ano, havia 5.224 palestinos em prisões israelenses, em grande parte militares, instaladas na Cisjordânia. Um de três exemplos deste tipo é a prisão de Ofer (as outras duas são Megiddo e Ktzi'ot), próxima à sede administrativa do governo palestino, a cidade de Ramallah.

Dessa prisão, a jovem Mariam Barghouti, de 20 anos de idade, estudante de literatura, foi liberada nesta quinta, após quase uma semana detida sob a acusação de “atirar pedras”, bastante comum contra manifestantes palestinos – inclusive crianças – em suas expressões de resistência, mas negada pela jovem. Mariam foi detida enquanto acompanhava jornalistas no protesto semanal organizado pelo comitê de resistência popular da vila de Nabi Saleh, na Cisjordânia.

Após as eleições de 2006, que resultaram em uma crise política em processo de superação pelos palestinos, as forças israelenses prenderam aqueles eleitos pela plataforma do partido islâmico Hamas, que o governo de Israel classifica de “organização terrorista”. Sua base jurídica é outra das controvérsias: as Regulações Emergenciais de Defesa, em vigor desde a criação do Estado de Israel, em 1948 e, de fato, herdada da potência colonial no Mandato Britânico sobre a Palestina, inaugurado em 1922-1923.
Conselho Legislativo Palestino, instância legislativa da Organização para a Libertação da Palestina (OLP) – da qual a Autoridade Palestina (AP) é o Executivo. A detenção das crianças e de parlamentares palestinos é condenada internacionalmente, reconhecida não apenas como violações graves, mas também como uma estratégia de desestabilização social e política.

Al Fatah, Marwan Barghouti, prisioneiro palestino
Outros parlamentares que continuam detidos incluem Marwan Barghouti (liderança do partido governista Fatah, na foto, condenado a cinco penas de prisão perpétua, detido desde 2002) e Ahmad Sa’adat (líder da Frente Popular para a Libertação da Palestina, também preso em 2002), entre os nomes cujas campanhas por libertação têm grande peso internacional.

Além disso, em março havia também 183 palestinos em “detenção administrativa”, uma classificação jurídica cheia de irregularidades que regulamentam, de forma distorcida, um processo ilegal que viola direitos civis e políticos mais básicos. Sob esta classificação, palestinos “suspeitos” podem ser detidos por períodos de seis meses renováveis indefinidamente e julgados em cortes militares.


Negligência, tortura e outros maus-tratos


Nas prisões, as condições são condenadas amplamente, inclusive por jornalistas israelenses. As denúncias de torturas – “métodos avançados de interrogatório”, debatidos e supostamente “justificados” por autoridades israelenses que parecem ter aprendido a lição de seus aliados mais extremistas nos Estados Unidos – e maus tratos, além da própria negligência médica sistemática, estão entre as mais veiculadas pelos movimentos de solidariedade e as organizações de defesa dos direitos humanos.

Nestes casos de negligência médica e tortura, três palestinos morreram sob a custódia israelense, no ano de 2013. Além destes, outros 12 foram mortos durante operações de detenção, que frequentemente se dão de forma violenta, com confrontos e invasões militares com soldados e carros blindados do Exército nas comunidades palestinas.

Familiares pedem libertação dos prisioneiros palestinos
“A situação dos prisioneiros continua a deterionto eles enfrentam uma vasta gama de violações. Tanto os detidos quanto os prisioneiros continuam a sofrer de maus tratos e tortura de forma sistemática, inclusive as crianças. Desde 1967, 71 prisioneiros morreram como resultado da negligência médica e 53 morreram em consequência da tortura. O último foi Arafat Jaradat, torturado até a morte em fevereiro de 2013”, explica a organização Addameer, em sua página oficial.

Neste sentido, nos últimos 12 meses, houve um aumento das greves de fome. Em 2013, quase 40 palestinos prisioneiros começaram este tipo de protesto por diversas razões, sobretudo pela extensão de suas “detenções administrativas”, pela repetição da sua prisão ou pelos maus tratos nos centros carcerários. Naquele ano, o caso de Samir Issawi ficou conhecido devido ao longo período de nove meses em greve de fome e, atualmente, apenas Ayman Tbeisheh continua o seu protesto, que já dura 48 dias. 

Arbitrariedade “regulamentada” e negociações


Assim como a Addameer, a organização israelense de defesa dos direitos humanos B'Tselem também denuncia os processos arbitrários conduzidos pelas cortes de Israel na determinação da prisão e da sentença dos palestinos. Segundo a Ordem Militar 1651, por exemplo, aqueles presos novamente são levados a um comitê militar extraordinário que tem o poder de adicionar à nova pena o restante de uma sentença anterior não cumprida devido a acordos ou outras opções, com base em evidências completamente secretas.

Israel e os prisioneiros palestinos


As campanhas populares palestinas e globais contra a situação dos prisioneiros e as leis israelenses incluem uma denúncia à empresa privada de segurança G4S, envolvida não apenas nos sistemas de segurança das colônias ilegais em territórios palestinos e do muro de segregação (que já tem cerca de 700 quilômetros de extensão, engolfando trechos consideráveis da Cisjordânia), mas também “em muitas das prisões e centros de detenção em que os prisioneiros políticos palestinos são interrogados, torturados e aprisionados,” afirma a Addameer.

A organização também apela ao desenvolvimento de uma estratégia nacional de proteção a todos os palestinos detidos por questões políticas, para garantir a sua libertação; “isto é particularmente relevante devido à recente assinatura [pela OLP] de 15 tratados e convenções internacionais, inclusive a Quarta Convenção de Genebra,” que inclui a proteção aos prisioneiros e civis.

Esta estratégia, continua a Addameer, “é necessária para contrapor-se às tentativas israelenses de usar os prisioneiros como moeda de troca, o que ficou evidente recentemente, quando [Israel] recusou-se a libertar o último grupo de 30 prisioneiros, em 29 de março,” conforme acordado nas pré-negociações que levaram à retomada do processo diplomático entre a AP e Israel, em julho de 2013.

A recusa israelense em liberar o último grupo em uma lista de 104 palestinos detidos ainda antes dos Acordos de Oslo, do início da década de 1990, é apontada pela AP como a principal causa da suspensão das negociações, que têm como prazo final o dia 29 de abril, após um longo período sem qualquer avanço diplomático e de expansão destrutiva da ocupação, com o aumento das colônias israelenses em território palestino, em detrimento dos diálogos e da resolução da questão.





Palestinos denunciam Israel e pedem ajuda do Papa para ir a Jerusalém

Palestinos querem ajuda do Papa para ir a Jerusalém


Cristãos da Cisjordânia precisam ter autorizações de Israel




Papa Francisco irá à Terra Santa
Francisco irá à Terra Santa no próximo dia 24 de maio (foto: EPA)

17 Abril, 15:51•CIDADE DO VATICANO•ZLR

(ANSA) - Marcelline é uma jovem cristã que vive a poucos quilômetros de Jerusalém, onde estão alguns dos lugares mais sagrados de sua religião. Contudo, por ser uma palestina de Belém, na Cisjordânia, ela precisa da permissão do governo de Israel para visitar tais locais, e nem sempre essa autorização é dada. Sua situação é compartilhada por milhares de conterrâneos, que esperam que a viagem do papa Francisco à Terra Santa, entre 24 e 26 de maio, sirva para...LEIA MAIS


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Palestinos cristãos denunciam que Israel impede acesso ao Santo Sepulcro


EFE | Jerusalém

Um grupo de associações comunitárias cristãs de Jerusalém Oriental denunciou neste domingo que Israel restringirá o acesso à Basílica do Santo Sepulcro durante a próxima Semana Santa em uma medida que considera discriminatória e racista, argumentos que a polícia israelense rechaça taxativamente.

"As medidas restritivas constituem uma grave violação da liberdade de culto", adverte um comunicado divulgado neste domingo pelas organizações, que incluem fraternidades, clubes sociais, comunitários e esportivos, assim como grupos de escoteiros, segundo o porta-voz Youssef Daher.


Israel impede acesso de cristãos palestinos ao Santo Sepulcro
De acordo com palestinos cristãos, Israel restringirá o acesso
à Basílica do Santo Sepulcro, em Jerusalém. EFE/Arquivo

"Equivale à discriminação contra os cristãos porque as autoridades da ocupação desejam negar a presença cristã e criar a impressão que (Jerusalém) é uma cidade unicamente judia", destaca a nota, divulgada após uma reunião realizada no sábado para analisar o problema.

Israel, que controla a Cidade Antiga de Jerusalém desde 1967, impõe durante esta época do ano, na qual os cristãos lembram a Semana Santa e os judeus o Pessach (Páscoa), blitzes e controles policiais nas proximidades de todos os lugares santos, explicou à Agência Efe o porta-voz policial do Distrito de Jerusalém, Asi Aharoni.

"Bloqueamos os acessos ao recinto porque o perímetro é limitado e tentamos evitar que aconteçam tragédias e situações nas quais devido a um número grande de pessoas não possamos garantir a segurança do local", justificou.

Aharoni colocou como exemplo o fato de que durante momentos de grande devoção e com milhares de pessoas no templo cristão e seus arredores é possível acontecerem desmaios ou outros distúrbios nos quais as equipes de emergência devem poder atuar, razão pela que limitam o acesso.

As restrições são mais severas durante o Sábado de Aleluia, na qual os fiéis ortodoxos realizam a grande cerimônia do Fogo e da Água, na qual se acendem centenas de velas, o que representa um risco especial para a segurança.

Para as associações cristãs palestinas, trata-se de uma medida exagerada, similar à qual sofrem os fiéis muçulmanos que "não podem rezar livremente nem estar com suas famílias e amigos durante ocasiões especiais".

De acordo com Daher, em uma série de medidas restritivas introduzidas pela Polícia israelense em 2005, os cristãos também não podem subir até o teto da basílica, como costumavam fazer até então, nem ocupar durante a cerimônia do Fogo a parte exterior de acesso, onde caberiam outras 4 mil pessoas.

Durante este mês, o Ministério de Turismo israelense tem prevista a chegada de 125 mil visitantes, pouco mais que o ano passado, dos quais mais da metade costumam ser cristãos que desejam celebrar a Semana Santa.

domingo, 13 de abril de 2014

Israel prende 900 crianças palestinas por ano

Soldado israelense prende criança palestina




Video produzido pela organização israelense de direitos humanos B'Tselem com depoimentos de crianças palestinas que foram presas:







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30 de Março de 2014 - 16h40

Neste domingo (30), a Palestina comemora o Dia da Terra, data que lembra a greve geral realizada em 1976, quando o governo de Israel anunciou um plano para confiscar terras. Os palestinos resistiram, mas foram reprimidos pelo exército ocupante. O Vermelho, que está na Cisjordânia e acompanha a Missão de Solidariedade ao Povo Palestino, ouviu relatos de ativistas sobre alguns dos abusos que os palestinos ainda sofrem por parte dos israelenses.

Por Théa Rodrigues, de Ramallah para o Portal Vermelho


Em 1976 o governo israelense divulgou um plano de apropriação de territórios árabes para a construção de novos assentamentos judaicos. No dia 30 de março do ano referido, o povo palestino realizou uma greve geral e várias passeatas em resposta àquilo que estava sendo justificado como "medida de segurança". Por sua vez, o exército israelense enviou tropas a três aldeias (Sakhnin, Arraba e Deir Hanna) a fim de reprimir as manifestações. A presença das forças militares transformou a greve em protesto e, pouco depois, em revolta. O confronto resultou em 6 árabes mortos, além de 96 feridos e 300 presos.

Exatos 38 anos depois, os palestinos continuam a reiterar a demanda pelo fim da divisão dos territórios palestinos e da ocupação israelense na Cisjordânia e em Jerusalém. O Portal Vermelho está em Ramallah, na Cisjordânia, onde acompanha a delegação da Terceira Missão de Solidariedade ao Povo Palestino (organizada pelo Comitê Pela Criação do Estado da Palestina e que traz representantes de diversas entidades brasileiras), e entrevistou alguns ativistas e defensores dos direitos humanos que também lutam pela causa na região.

Brasileiro relata frequentes violações das leis internacionais


Entrevistado pelo Vermelho, um jovem ativista brasileiro, que acompanha as situações de vulnerabilidade dos direitos humanos pela organização Cristian Peacemaker Team, preferiu não se identificar para evitar problemas nos check-points (postos militares de controle sionista) – isto porque Israel faz um controle minucioso daqueles que entram e saem dos territórios palestinos e, como já é sabido, dificultam o trânsito dos que oferecem qualquer tipo de ajuda à Palestina.

O brasileiro contou que sua organização registra com frequência diversas violações das leis internacionais por parte dos sionistas. “A própria ocupação, como é organizada e a maneira como está presente na fragmentação dos territórios palestinos é a mais gritante dessas violações”, afirmou. De acordo com o ativista, “há postos de controle em locais onde as pessoas precisam passar diariamente e ali sofrem todo o tipo de assédio moral. Isso é um ponto de humilhação para o povo palestino”.

Em alguns lugares, as crianças precisam passar por um posto de controle para chegar à escola. O brasileiro afirmou que elas têm suas mochilas revistadas todos os dias e muitas são impedidas de passar. Segundo o defensor dos direitos humanos, nesses lugares os confrontos também acontecem todos os dias e os jovens além de conviver com a violência acabam se envolvendo nesses episódios.

Ele lembrou ainda que há uma dura repressão dos militares israelenses a qualquer manifestação pacífica. “Pessoas são presas porque na lei militar israelense que rege esses territórios, não há direitos políticos. Proferir um discurso político pode ser considerado ilegal. Até mesmo carregar bandeiras palestinas pode ser considerado ‘ameaça’. Os israelenses utilizam a questão da ‘segurança’ como desculpa para tudo”, disse.

A lei militar para os territórios palestinos é diferente da lei israelense que protege os colonos. De acordo com o ativista, os militares podem prender crianças a partir dos 12 anos de idade. Em março do ano passado, 27 jovens foram presos de uma vez. Além disso, elas são interrogadas, muitas vezes vítimas de maus tratos e de reações desproporcionais por parte do exército israelense, o que configura uma clara violação aos direitos das crianças. “Uma criança joga uma pedra contra um posto de controle e o exército responde com bomba de gás lacrimogêneo”, relatou ele.

Os israelenses alegam que crianças podem ser utilizadas como “homens-bomba”, o que configura crime de terrorismo. De acordo com o brasileiro, houve 9 casos desses registrados durante a Segunda Intifada (revolta civil dos palestinos contra a política administrativa e a ocupação Israelense na região da Palestina a partir de setembro de 2000) e mais nenhum desde então. Por outro lado, dados mostram que 900 crianças palestinas são presas por ano pelo exército de Israel.

Um israelense contra a ocupação


Ben Ronen é israelense, vive em Tel Aviv, mas há 10 anos atravessa a fronteira para participar dos protestos chamados de “demonstração” – uma forma de resistência pacífica, que marca a presença palestina e chama a atenção para o aumento da capacidade de anexação do território – que acontecem tradicionalmente às sextas-feiras.

Ronen contou ao Vermelho que o circulo social que ele frequenta é formado por pessoas solidárias à causa palestina, contudo, no bairro onde mora, a maioria pensa de maneira bem diferente. “Tenho várias acusações contra mim, estou sendo submetido a vários julgamentos e já passei alguns dias na prisão por participar dos protestos de apoio aos palestinos”, disse o ativista israelense.

Segundo ele, seus pais já praticavam esse tipo de solidariedade e quando foi morar em Tel Aviv conheceu jovens que estavam na militância política a favor da causa palestina e foi a convite deste grupo de amigos que Ronen veio a primeira vez à Cisjordânia. “Quando cheguei, senti que tinha um compromisso aqui, então venho cumprindo sistematicamente o meu dever”, afirmou.

“É muito difícil se aproximar das pessoas com um discurso diferente do discurso do Estado, porque este controla não somente a mídia, mas também o sistema educacional. Ou seja, desde cedo as crianças são orientadas para que entrem no serviço militar e defendam Israel das provocações palestinas”, comentou.

Ronen não acredita em uma solução em curto prazo para o conflito, por isso ele optou por exercer uma política prática de militar em favor dos palestinos e de construir alianças muito pontuais, entendendo que “a luta se faz a cada dia” em uma perspectiva de longo prazo.

De acordo com o ativista, um dos principais problemas é que o governo israelense coloca os cidadãos de seu próprio país como “reféns do medo” e com todas as políticas de “segurança” fica muito mais difícil abordar uma mudança de mentalidade. Ronen também falou que as pessoas são incapazes de associar os problemas que a sociedade israelense vem enfrentando – ele citou as dificuldades econômicas como exemplo – com os gastos militares da ocupação.


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Criança palestinas presas por Israel e soldado fotografa
Criança palestina é presa indo para a escola
menino palestino é cercado e preso por soldados israelenses
Soldados israelenses prendem criança palestina
Soldados israleenses prendem e vedam olhos de menino palestino
Soldados de Israel prendem menino e mãe tenta livra-lo
soldados israelense vigiam crianças feitas prisioneiras
soldado israelense prende e torce o braço de uma menina palestina
Soldados prendem menino palestino
soldados terroristas de Israel prendem crianças palestinas
Soldado do exército terrorista de Israel prende menino palestino
soldado terrorista israelense prende menino e pai tenta livra-lo
soldados terrorista de Israel algemam menor palestino
soldados terroristas de Israel vigiam crianças palestinas presas
menino palestina chora enquanto é preso por soldados israelenses
soldado terrorista de Israel aponta arma para criança palestina
Soldados terroristas de Israel prendem e arrastam criança palestina
Manifestação pela libertação ds crianças palestinas presas por Israel


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Sobre a crueldade de Israel com as crianças palestinas


Crianças palestinas, presas e torturadas por Israel


quinta-feira, 3 de abril de 2014

Embaixador França: Brasil apoia a causa palestina

Missão Brasileira se reune com Embaixador do Brasil na Palestina




29 de Março de 2014 - 18h00

Brasil doa alimentos para 5 milhões de refugiados palestinos


A delegação brasileira da Terceira Missão de Solidariedade ao Povo Palestino foi recebida na última sexta-feira (28) por Paulo Roberto França, embaixador do Brasil para a Palestina em Ramallah, na Cisjordânia. Durante a reunião, França falou sobre as iniciativas na região e ressaltou o papel do Brasil na luta pelo reconhecimento do Estado palestino.

Théa Rodrigues, de Ramallah para o Portal Vermelho


       
Embaixador do Brasil na Palestina, Paulo Roberto França
Embaixador do Brasil para a Palestina em Ramallah, Paulo Roberto França,
recebe comitiva brasileira da Terceira Missão de Solidariedade
ao Povo Palestino.

“O Brasil tem sido muito consistente no apoio à causa palestina”, disse o diplomata ao recordar que o país votou a favor do reconhecimento de um Estado palestino observador não-membro na Assembleia Geral da ONU em 2012. França lembrou também que a presidenta Dilma Rousseff frequentemente inclui em seus discursos uma menção ao direito de autodeterminação e soberania do povo palestino. Segundo ele, este tipo de posicionamento “facilita o trabalho diplomático do ponto de vista político”.


O embaixador comentou à delegação brasileira de solidariedade e ao Portal Vermelho que um acordo de livre comércio com a Palestina está sendo submetido ao Congresso para ratificação. De acordo com ele, “a ideia é que com a eventual aprovação deste acordo, o intercâmbio com o Brasil favoreça a produção e a criação de empregos na Palestina”.

O Brasil também tem um acordo de livre comércio com Israel, contudo, o decreto legislativo diz de maneira clara que os produtos originários de assentamentos não podem ser beneficiados com a isenção de imposto. França disse que o Brasil apresentou essa posição ao governo israelense e afirmou que o tema será objeto de discussão no decorrer deste ano, na comissão do acordo.

Sobre as iniciativas da Embaixada brasileira na Palestina, o diplomata disse que foram desenvolvidos diversos programas nas áreas de educação, saúde e segurança alimentar. “No ano passado, durante a visita do ministro da saúde, Alexandre Padilha, estivemos em Hebron, onde inauguramos uma clínica, que foi financiada pelo Brasil”, contou França, que afirmou ter sido um momento de grande emoção por ser a concretização da contribuição brasileira para o desenvolvimento da Palestina. “Também na região de Hebron, construímos uma escola e, na inauguração, fui recebido por crianças palestinas com bandeiras do Brasil nas mãos”, relatou o embaixador brasileiro.

Contribuição brasileira aos refugiados palestinos

O Brasil também contribui com a Agência da ONU de Trabalhos e Assistência aos Refugiados palestinos (UNRWA, em inglês), que tem como principais funções o fornecimento de produtos alimentícios, educação e saúde. Segundo França, nos últimos dois anos, o governo brasileiro aportou entre 9 e 10 milhões de dólares em dinheiro para a UNRWA. Trata-se do primeiro país em desenvolvimento e o primeiro do grupo dos Brics (formado por Brasil, Rússia, Índia, China e África do Sul) que tem tão alto nível de contribuição.

Não obstante, recentemente, o Brasil enviou 8 milhões de dólares em arroz que serão distribuídos em todos os campos de refugiados palestinos administrados pela UNRWA. “O Brasil está doando arroz para 5 milhões de pessoas na Cisjordânia, em Gaza, no Líbano, na Síria e na Jordânia”, disse França ao ressaltar que essa iniciativa equivale ao consumo de um ano de todos esses refugiados. Segundo o diplomata, o primeiro lote desta contribuição brasileira deve chegar já no mês de abril à Gaza.

Cooperação com outros países

O Brasil, a África do Sul e a Índia mantêm uma parceria em três projetos de solidariedade ao povo palestino. Um deles é o financiamento da renovação de todo um setor do Hospital Crescente Vermelho, em Gaza. “São salas de cirurgia com equipamentos cardiovasculares com um nível de qualidade que não existe hoje naquela região”, afirmou França.

Obras brasileiras na Palestina

O governo do Brasil também investiu na construção de um Palácio de Esportes em Ramallah e de um centro de reabilitação em Nablus. Além disso, de acordo com as informações expostas pelo embaixador brasileiro, em uma cooperação bilateral, o Brasil participou da edificação de três pontes em Gaza, com auxilio do PNUD.

“Infelizmente, uma dessas pontes que ia ser inaugurada em novembro do ano passado, foi destruída pelas operações militares israelenses, durante o conflito”, relatou França. Apesar disto, a avaliação do diplomata em relação ao apoio brasileiro à causa palestina é bastante positiva. “Estamos contribuindo para o desenvolvimento de um Estado da Palestina”, afirmou.

Fonte: Portal Vermelho

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